domingo, 7 de diciembre de 2008

Después del ensayo

A lo que más se parece a veces el ejercicio de la música es al duro trabajo del pico y la pala: repetición y sudor, frustración, paciencia, fe. Primer ensayo de los tres coros que estamos preparando el concierto de navidad con la Orquesta de Cámara de Huesca. Problemas de empaste, típicos cuando se reúnen corales acostumbradas cada una a sus directoras; problemas con la sonoridad de la sala del Palacio de Congresos de Barbastro donde estamos ensayando, cuadrada y de techo muy bajo; problemas con algunas partituras que contienen diferencias entre unos grupos y otros; problemas con los tenores de los tres coros, que definitivamente no tienen su día; etcétera. Sí, yo diría que, en cuanto al ejercicio de la música se refiere, la fe, casi tanto como el pico y la pala, es un elemento absolutamente imprescindible.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Sigue con el pico y la pala que al final lo conseguireis, esto siempre ocurre en tu familia que el esfuerzo tiene su recompensa. No os podremos ver, pero si os tendremos en el corazon.

Jesús Miramón dijo...

Bueno, estoy seguro de que todo saldrá muy bien y disfrutaremos mucho, todo el esfuerzo se dirige hacia esa dirección. Desconozco qué familiar eres exactamente pero os envío un beso a todos.