domingo, 12 de mayo de 2019

Doce de mayo

En el piso que quedó vacío hace unas semanas frente a mi dormitorio se ha instalado una nueva familia. Un hombre se asoma a la calle y se pone a silbar. No son canciones que yo conozca, tengo la impresión de que improvisa. Mezcla música celta, clásica y jazz, yo diría. Silba muy bien. He estado a punto de asomarme yo también a la ventana y ponerme a aplaudir, como en un concierto.

2 comentarios:

Elvira dijo...

Me ha encantado.

Un beso

Jesús Miramón dijo...

Gracias, Elvira. Fue tal cual lo escribo. Silbaba muy bien. Un beso.

(He desbloqueado los comentarios, espero que no vuelva el spam)