sábado, 25 de enero de 2020

Como si fuésemos a entrar en abril

Me cuesta mucho creer que todavía no haya terminado enero. Para mí es como si fuésemos a entrar en abril, eso me dicen los sentidos, la memoria, la sensación del tiempo transcurrido. ¿Todavía es enero? ¿Ni siquiera ha pasado un mes desde aquel lejano, lejanísimo día de año nuevo? Sí. No. Vuelvo a ser un niño, cuando el tiempo no existía ni existiría jamás.

3 comentarios:

Fackel dijo...

Y qué eternidad aquella, ya lo creo. Qué lentitud de días, como si no creciéramos.

Recomenzar dijo...

dia a dia es mi vida
no planeo

nazco a diario y recomienzo
abrazo desde Miami

Jesús Miramón dijo...

Y enero se mantiene vivo, casi tanto como mi insomnio. Pero terminará y dará paso al futuro. Un saludo a los dos desde Aragón.