sábado, 24 de noviembre de 2012

Después del ensayo

Después del ensayo vamos al Chanti a tomar una copa. A mi parecer no hace mucho frío pero de todos es sabido que mi cuerpo es de fuego. Entramos en el local ya casi vacío, pedimos nuestras bebidas y nos sentamos a una de las mesas. Cuántas veces, cuántos viernes he venido aquí con estos mismos amigos a los que quiero tanto aunque ellos no lo sepan. Hablaremos y hablaremos sin parar poniéndonos serios ahora y riéndonos después. Con ellos me siento libre de hablar sin ser políticamente correcto; con ellos puedo permitirme el placer de ser salvaje, radical, insensato, apasionado, sincero; con ellos puedo ser yo en estado puro, si algo así es posible.

Al volver a casa devoro con hambre de lobo lo primero que pillo de la nevera y después me sirvo un bourbon con hielo, subo a la buhardilla, abro la tapa blanca de mi MacBook y escribo: «Después del ensayo vamos al Chanti a tomar una copa».

14 comentarios:

NáN dijo...

Qué alegría, venir de un ensayo y estar tan con tuyos que puedas ser insensato.

molinos dijo...

Que guay...yo quiero ir a tomar copas contigo..pero si hay que cantar antes lo llevo crudo porque canto de angustia. XD

Jesús Miramón dijo...

Exacto, Nán, esas noches son un espacio de relajación y libertad de propiedades curativas, uno de los pequeños (o grandes) tesoros de la vida.

Un abrazo.

Jesús Miramón dijo...

¡Me encantaría! Ah, y no es necesario cantar antes, también se puede escuchar (aunque he de decir que cada cierto tiempo algunos ensayos salen, nadie sabemos muy bien por qué, de angustia... ).

Un beso.

Elvira dijo...

Yo me apunto a todo, a cantar también. :-)

Y totalmente de acuerdo con NáN. Poder estar tal cual eres, sin filtros, sin precauciones, genial!

Besos

Jesús Miramón dijo...

Apostaría que eres soprano... Un beso, Elvira, y gracias gracias una vez más.

Elvira dijo...

Mezzo... :-)

Elvira dijo...

Y de nada, amigo!

Portarosa dijo...

¡Uau, cuerpo de fuego!

El sábado fui a escuchar a mi padre, que hace poco volvió a cantar, en una coral polifónica; y me acordé de ti.

Un abrazo.

Paco dijo...

Manos mal que he tomado el enlace de tu MacBook de tapa planca para salir de este bucle infinito.

Eternamente viendo como llegas del Chanti y te sirves un bourbon con hielo y subes a la buhardilla y abres el MacBook y escribes.....

Jesús Miramón dijo...

Bueno, Porto, lo del cuerpo de fuego hace referencia a que nunca o casi nunca tengo frío...

¡No sabía que tu padre cantara en un coro, qué bien!

Un abrazo.

Jesús Miramón dijo...

Paco, es curioso cómo poco a poco han ido creciendo en número estos textos después del ensayo, sobre todo teniendo en cuenta que siempre cuento lo mismo, o tal vez no, tal vez no exactamente lo mismo sino "aproximadamente" lo mismo. Me gusta creer que en ese "aproximadamente" se encuentra el misterio de la deriva de mi vida.

El bucle con el que termina la entrada es uno de esos típicos trucos con que a veces nos adornamos quienes llevamos escribiendo mil años.

Un abrazo.

giovanni dijo...

Eso del Chanti es un lugar que se transforma en oasis con la visita de ustedes.

Un abrazo

Jesús Miramón dijo...

¡Y tú has estado allí a mi lado!