El tiempo ha cambiado, incluso es posible que llueva. Conduciendo hacia el trabajo veo un Citröen Picasso gris detenido en el arcén y a su lado un hombre arrodillado tomando fotografías de las viñas a la luz de la mañana recién nacida. Si el coche hubiera sido de color rojo y el hombre hubiese tenido el pelo más largo bien pudiera haberse tratado de mí mismo en un cortocircuito espacio-temporal, uno de esos agujeros de gusano donde presente y pasado comparten durante un segundo el mismo instante.
miércoles, 1 de septiembre de 2010
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15 comentarios:
El mundo anda lleno de agujeros negros que condensan realidades que iluminamos con nuestra mirada. Muy sugerente esa identificación/contraste que haces a partir de la alegoría del color y el retrato del sujeto. Dices bien: existe el espacio y nosotros lo cruzamos con el tiempo...
Un abrazo narrativo
enric
Gracias, Enric.
(Finalmente no ha llovido pero tal vez lo haga por la noche. Sería maravilloso. La lluvia amortigua un poco el vértigo de la velocidad.)
Ojalá llueva... con truenos y relámpagos... me encanta.
Hola, Diva, ahora mismo son las dos menos cuarto de la madrugada y llueve y truena. Supongo que este mundo debe de ser real si la lluvia y los truenos son capaces de despertarte.
Hoy no me gusta tanto que llueva, la verdad... he salido de casa con CHANCLAS!!! Ya me vale... Se me olvido mirar por la ventana...
¿Una o uno? Porque si se trata de un monovolumen habría que decir "un Citröen Picasso gris detenido en el arcén". Cosa distinta es que sea una furgoneta. Yo, pa mí, que es un monovolumen.
Bolo
Nuestro mundo guarda sus secretos, no dudes ni por un segundo que alguno nos tocara vivirlo...
Bolo, tus comentarios son órdenes para mí (de hecho así lo escribí al principio, pero que conste que en casa siempre la tratamos en femenino, «la Picasso», probablemente porque el vendedor y los mecánicos del taller las llaman así, no sé por qué).
Hola, Ayshane, cada día me levanto con la esperanza de que el mundo me desvele algún secreto nuevo. Bienvenida a mi blog.
Aquí también ha llovido hasta media mañana, Diva. Ni sé cuánto tiempo hacía que no llovía. Una gozada (con chanclas o sin chanclas).
:-)
Igual eras tú dentro de unos meses, en que te has cortado el pelo y te has comprado un nuevo coche
¡Anda, Miguel, es verdad, también podría ser una visión del futuro! ¿Por qué siempre que imagino viajes temporales afectan sólo al pasado?
Porque los viajes temporales al futuro ya los tienes: son la vida.
Solo que es tiempo real :)
¡Tienes razón, Porto, es por eso: para viajar al futuro basta con respirar! El pasado es otra cosa (imposible).
Un abrazo.
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Cada día me siento más orgulloso de los lectores que tengo (vosotros).
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