Soy una de esas personas que entran en un restaurante con su compañera, la mujer que ama, y cuando viene la camarera a ofrecer la carta imagina, sólo por imaginar, en cómo sería ser su pareja, tal vez el cocinero que trabaja en la cocina sudando pero disfrutando de hacer algo que le gusta; en cuántos hijos tendría con ella; el cansancio de la hora del cierre sólo aliviado por la escasa nieve de las altas montañas al otro lado de la carretera brillando bajo la luna.
Soy una de esas personas que al entrar en un bazar chino se pregunta cómo sería vivir con una mujer china, concretamente con la que vigila el pasillo del ajuar de cocina, pequeña y delgada. ¿Le gustaría la comida española que yo le cocinaría pensando en el sexo de después? ¿Qué me cocinaría ella después del sexo? ¿Iríamos a caminar por el campo o su trabajo intensivo se lo impediría? ¿Sería una historia de amor imposible?
lunes, 15 de mayo de 2017
Una de esas personas
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2 comentarios:
Qué curioso. Yo nunca había pensado eso así.
Yo muchas veces. No puedo evitarlo.
Un abrazo y perdona que no te haya contestado antes, pero últimamente estoy muy desconectado.
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