sábado, 9 de abril de 2022

Balada

La melancolía, como la tristeza, no lleva a ninguna parte, pero durante el viaje tiene el poder de producir cierto placer, un sometimiento emocional, un dejarse llevar, una entrega sensual. Es algo que saben bien las obras de ficción y también nuestra memoria. Es por eso que triunfan las baladas musicales y los poemas de amor no correspondido. Racionalmente no tiene mucho sentido pero, al mismo tiempo, analizándolo desde mi ignorancia infinita, ¿qué mejor modo que afrontar la insensatez de nuestra existencia, nuestras frustraciones y fracasos, que hallando cierto placer absurdo en el proceso? Nuestro cerebro sabe más que nosotros.

2 comentarios:

Fackel dijo...

Mientras tal ejercicio sea un viaje de ida y vuelta y además de cercanías...

Jesús Miramón dijo...

Gracias por tus comentarios. Un abrazo.