Leo que es posible que unos arqueólogos italianos hayan descubierto los huesos de Lisa Gherardini, la famosa Mona Lisa de Da Vinci, e inevitablemente viene a mi memoria aquel poema maravilloso de José Jiménez Lozano:
LAS MENINAS
Le dijiste al crítico de arte:
Está bien su explicación, pero
yo sólo vengo a ver a María Bárbola,
a Nicolasillo Pertusato, al perro,
y a ver abrir la puerta al Intendente Nieto.
Te callaste
que en aquella habitación no se respira;
la Princesita bebe agua ¡Pobre!
¿Y si me preguntase?
Yo he visto su sepulcro en Viena.
miércoles, 18 de julio de 2012
Su sepulcro en Viena
Anotado por Jesús Miramón a las 01:02 | Diario , Nombres propios
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2 comentarios:
en un acto de piadoso agradecimiento, veo una sonrisa en esos huesos.
Los huesos son sabios y no lo saben.
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