Vivo con mi pareja en este apartamento frente al río Vero, en Barbastro. Binéfar es ahora apenas un recuerdo precioso, la infancia de mis hijos, los años del coro, amigas y amigos que poco a poco se desvanecen en mi memoria diaria. Porque poco a poco todo se desvanece silenciosa, irremediablemente.
sábado, 23 de septiembre de 2017
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9 comentarios:
Quéi delicia este blog!
Muchas gracias! (Y bienvenida)
Precioso...
Muchas gracias, Fernando!
Hay amigos q se suceden
Y amigos q se amontonan
de ambos tiene q haber.
Abrazos
De aquí a allá
pajaricos habrá.
Un abrazo.
a veces pareciera que pasamos la vida intentando retener briznas de las cosas que hemos ido perdiendo. Como si llegada cierta edad, todo se redujese a ir perdiéndolo todo.
Somos, entre otras cosas, naves orgánicas navegando hacia el futuro, y confieso que a veces yo me ensimismo a popa para ver lo que queda atrás cuando debería recorrer toda la cubierta hasta asomarme a proa, algo que hago también a veces. Es complicado. Somos primates esquizofrénicos. Gracias por el comentario, Beauséant.
Bueno, pero nos veremos pronto, en cuanto llegue de verdad el frío.
Un abrazo
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