sábado, 1 de abril de 2023

Todo está bien

Camino a través del campo inflamado de color verde esmeralda, las primeras amapolas asombrosamente rojas, las nubes blancas en el cielo azul; camino junto a la mujer que amo desde los dieciocho años y amaré hasta la muerte; camino con una tristeza de meses palpitando en la articulación de mi dolorido hombro derecho.

Se escuchan los pájaros alejándose a nuestro paso, y las hormigas y escarabajos despertaron del sueño invernal para salir a la luz del mundo y cruzar delante de nuestro paseo. Alguna vez, en el futuro, lo harán sin nuestra presencia, ya extinguida.

Pero yo no estoy triste por algo inmenso y significante y profundo, yo estoy triste por lo mismo que estuvieron tristes millones de hijas e hijos antes que yo: la decadencia y desaparición de quienes me trajeron a este mundo insólito y me quisieron, me cuidaron, me besaron y mimaron tantas veces.

Todo está bien: la luna brilla en el cielo sobre esta pequeña ciudad, mi corazón palpita en la absoluta oscuridad del interior de mi pecho, todo está bien.

6 comentarios:

Berna Wang dijo...

Te entiendo y te abrazo.

Jesús Miramón dijo...

Un abrazo, Berna. Y un beso también.

fernando dijo...

Un abrazo fuerte.

Jesús Miramón dijo...

Otro de vuelta para ti. Gracias.

andandos dijo...

También te entiendo, y ya pienso en la decadencia propia, cercana.
Un fuerte abrazo!!

Jesús Miramón dijo...

Un abrazo, José Luis.