Regreso de Zaragoza atravesando la densa niebla, concentrado en las luces traseras del vehículo que me precede. Dentro del coche todos duermen, blandamente abandonados a mi pericia. Tienen confianza en ella. Yo, por mi parte, los amo, los protejo, los traigo a casa, etcétera.
martes, 25 de diciembre de 2007
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5 comentarios:
vuelves, a casa, vuelves
con mi niño en la pierna sentado te escribo, alegre de haberte reencontrado!!
a veces parece que la vida es un barrio del pasado
abrazos
koldo
Feliz año, Jesús.
Y un abrazo muy fuerte a ti y a los tuyos.
Javier
Hola, recién llegado del viaje de fin de año os deseo a todos, aunque sea con retraso, feliz 2008 y mucha salud y amor.
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Un abrazo, Javier, y feliz año.
¿Koldo? Conocí a dos, y a los dos enviaría con gusto un abrazo.
Esa etcétera tiene un significado que normalmente no lo tiene. Me gusta y también me gusta lo que antecede (precede) a la etcétera.
Un abrazo
Lo maravilloso de la palabra etcétera es que su significado depende de ti.
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