En los campos de cebada han comenzado a asomar los primeros brotes verdes. Desde lejos parecen suaves alfombras de tacto blando y delicado, mas si uno se acerca se da cuenta de que las yemas están separadas entre sí por tormos de tierra roja y piedras pequeñas.
lunes, 4 de febrero de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Sin comentarios
Publicar un comentario