La noche es fría y negra. Las ventanas de la colmena se irán apagando de una en una hasta ceder el testigo de nuestra existencia a las pálidas, pequeñas, amarillas luces de las farolas en las calles desiertas. Más allá, en campo abierto, la humedad cristaliza minuto a minuto. Pronto vendrá la aurora fría y blanca.
sábado, 19 de diciembre de 2009
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4 comentarios:
Qué bien, la Aurora fría y blanca.
Gracias, Ángel, sobre todo teniendo en cuenta que tú eres un experto en auroras.
Es bueno saber trazar círculos cada vez mayores desde el punto donde estamos. Incluir el campo que rodea el pueblo.
Y el mar, más lejos; y el cielo, la estación espacial y sus astronautas, Marte, el sistema solar, el espacio exterior...
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