El sábado por la mañana quedamos en Lérida con unos amigos que viven en Reus. Hacía un tiempo magnífico y dimos un paseo por la calle mayor. También visitamos la catedral más antigua, la Seu Vella, situada en la cima del Puig del castell, el punto más alto de toda la ciudad. De la catedral me impresionó el claustro y sus grandes ventanales góticos. Siempre me han gustado mucho los claustros, la paz y el reposo que se respira en ellos. Un grupo de niños y niñas vestidos de primera comunión esperaban silenciosamente junto a la puerta de la iglesia el momento de salir al encuentro de los flashes de las cámaras fotográficas.
Al mediodía fuimos a comer a un restaurante situado en las huertas de árboles frutales que rodean la capital. Pedimos caracoles a la llauna, ensalada de setas, esqueixada de bacalao, jamón ibérico, parrillada de carne... comimos muy bien. Después de los cafés y los chupitos de orujo nos fuimos a caminar por los campos circundantes.
El sol brillaba en el cielo, no hacía demasiado calor, a nuestro alrededor todo era verde y los viejos amigos estábamos juntos. Una perra de color canela salió de una masía y decidió acompañarnos. Trotó mansamente a nuestro lado durante un buen rato.
domingo, 18 de mayo de 2008
Una excursión
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2 comentarios:
Jesús: he ahí un menú que añoro. Sobre todo los caracoles a la llauna.
Estaban buenísimos, y el alioli, oh, uno de los mejores que he comido en toda mi vida... :-)
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