Hoy me desperté espontáneamente a las siete, no sé por qué. Ya era de día. Fui al baño a hacer pis. Sabía que era Sábado. Volví a acostarme y me dormí de nuevo. Desperté a las diez y media de la mañana, fresco y radiante como un ababol.
Por eso, entre otras cosas, adoro los días festivos.
sábado, 1 de junio de 2019
Uno de junio
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Sin comentarios
Publicar un comentario