jueves, 25 de marzo de 2010

Vigesimoquinto día

Rápido, corre, escribe algo antes de que el reloj señale las doce de la noche, escribe, por ejemplo: «Rápido, corre, escribe algo antes de que el reloj señale las doce de la noche». Y sobre todo, escúchame bien, sobre todo no te preguntes el motivo de estos juegos, ¿acaso no disfrutas con el puro ejercicio de la voluntad?

2 comentarios:

Fernando dijo...

Así es: los mejores posts son los que uno redacta sin estar inspirado, los que hace por sentido de la obligación, quizá a partir de una idea que parecía una bobada sin futuro.

Jesús Miramón dijo...

Hola, Fernando, bienvenido. Yo todavía confío mucho en la «inspiración». Escribir diariamente sólo puedo concebirlo como un juego pasajero (salvo que uno se dedique profesionalmente, claro). Pero pienso que en el territorio de la escritura poética las musas continúan siendo muy importantes. Eso sí, la exploración incesante ayuda a que aparezcan. Un saludo.