Jueves. Siete y veinte de la tarde. Me acostaría en la cama y dormiría sin conocimiento, pero sé que a las dos o tres de la madrugada me despertaría. La niebla se ha disipado. Los chinos han aterrizado en la cara oscura de la luna.
jueves, 3 de enero de 2019
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3 comentarios:
Me encanta esta tercera entrada, mucho, por decir poco y mucho a la vez. Me encanta tu manera de decir las cosas.
Un abrazo
A mí también me encanta tu manera de decir las cosas. Y a ver cuándo podemos quedar. Sé que en Binéfar hay niebla pero hay aquí un sol precioso.
Un abrazo
¡Cómo valoras el sol después de tantos inviernos de niebla en Binéfar! Pero algún día, cuando menos te lo esperes, pensarás en esa niebla con cariño. A mí me pasa.
Un abrazo.
Y sí, ya quedaremos. Sabes, como yo, que más tarde o temprano sucederá.
Otro abrazo.
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