Por la mañana fuimos a pasear por el campo como cada fin de semana. Costumbres. Al cabo de uno o dos kilómetros vimos a un lado del camino los cuerpos de dos raposas, dos zorros. Por el entorno y la anchura de la vía yo diría que era imposible que hubiesen muerto atropellados: campo a un lado, un canal de agua al otro, así que sospecho que fueron víctimas de cazadores que, camino de su coto, vieron a los animales y les dispararon. No, no me detuve a hacerles una autopsia, pero en cualquier caso ha salido en las noticias que un cazador de Huesca, un psicópata, mató a golpes a un zorro delante de la cámara del móvil de un compañero cazador. La sentencia ha sido absolutoria porque la ley considera maltrato sólo a los animales domésticos, a los que dependen de nosotros, no a los silvestres. Es una sentencia que ha causado revuelo pero ahí está. Me he acordado de ella al contemplar los dos zorros muertos a la derecha del camino. Piel preciosa de cuerpos muertos agitada suavemente por la brisa.
A ver, voy a ser muy claro: un cazador de verdad no mata zorros. No me agrada ninguno, pero un poco más los que cazan perdices, faisanes y animales que se comen. Un cazador que mata, seguramente desde el coche, a dos zorros para dejarlos ahí tirados, pasto de los gusanos, es un miserable cabrón que debería plantearse seriamente sus conceptos morales.
Hice fotografías a los cuerpos de los animales muertos. Maite me dijo que qué pensaba hacer con ellas, (en mi imaginación pensaba publicar una de ellas en Instagram). Hablamos y me convenció. Las borré del móvil. Hace años publiqué alguna semejante, pero hoy no. No tengo derecho. Eran fotografías tristes. Podéis imaginarlas. Dos zorros muertos por disparos en el margen del camino. Esas imágenes no eran necesarias. Tengo mucha suerte de vivir con una persona tan sensible e inteligente.
sábado, 2 de marzo de 2019
Dos de marzo
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6 comentarios:
pues sí, un miserable cabrón como hay tantos... qué triste...
Disparar a animales y matarlos. Dos zorros. ¿Por qué? Porque no está prohibido. Tal vez una camada morirá de hambre cuando su madre o su padre no regrese, pero ¿qué les importa a ellos? Ni sienten ni padecen ni saben nada. Nada de nada con sus escopetas al hombro.
Dudo mucho que se pueda cazar zorros o animales silvestres sin permiso. Pero quién sabe, en un país tan atrasado y cavernícola... En todo caso, ¿no es bueno dar parte al SEPRONA? En caso de que haya un psicópata cabrón disparando a cualquier cosa que se mueva, ¿no deberían saberlo las autoridades por aquello de prevenir? Creo que, ante la duda, es buen alertar al SEPRONA, que saben si hay o no algún tipo de delito y por lo menos que estén al tanto de si hay algún psicópata furtivo por ahí, como aquél que disparó sobre los agentes de medio ambiente y se cargó a uno de ellos. Puesto que hay gente que se juega la vida por proteger la naturaleza, creo que los demás tenemos que colaborar con ellos.
Yo, en estos casos, ante la duda, siempre aviso a la policía que toque, al menos que sepan lo que pasa. Y no, no estoy de acuerdo en este caso con dejar pasar las cosas, no porque no es bueno ignorar, de hecho es la mejor manera de no solucionar nunca nada. No como exhibición, no, desde luego, pero sí intentar que se desenmascare a los hijos de puta que hacen estas hijoputeces tan grandes, que igual les da por disparar a dos zorros que su santa esposa.
Marisa, después de leer que la justicia ha dejado en libertad a ese cazador -oscense, por cierto- que mató a golpes un zorro delante de la cámara de vídeo de un compañero, ¿para qué denunciar? Debe cambiar la ley que, actualmente, sólo contempla como maltrato cuando sucede sobre animales domésticos o bajo el dominio del ser humano.
Por otra parte son zorros, que, como los jabalíes, se consideran, al menos en este territorio, una plaga al ser muchos y no tener depredadores.
Tengo la intuición de que quien lo hizo, seguramente al amanecer y mientras se dirigía al coto donde iba a cazar, lo hizo por diversión, y da asco, mucho asco. Pensaría que se estaba sacando de en medio dos competidores por la caza del conejo y las perdices, pero después de la sentencia que menciono, ¿qué se puede hacer? Cambiar las leyes. Por eso es tan importante votar y estudiar a quién votamos.
En el caso del post aludo a la ética o, más bien, a la falta de ética de la persona que mató a esos animales. Conociendo el terreno apostaría a que lo hizo desde el coche. Su ausencia de culpa o remordimientos. Aludo a mis pocos lectores. Si alguno o alguna de vosotras sois cazadoras, ¿mataríais a algún animal que no os vais a comer sólo por matar, por sentir ese terrible poder?
Dos animales muertos por nada, pudriéndose a un lado del camino. No está bien.
Yo estoy en contra de la caza, porque encima ni siquiera es verdad que contribuyan al equilibrio de las especies, como ya se ha encargado un juzgado de Castilla y León de dejar claro y por eso ha suspendido la actividad.
Los cazadores siempre buscándose excusas. Pero les da igual, todos sabemos lo que hacen muchos de ellos son sus perros y el gran problema social, ético y económico que generan con sus comportamientos. Muy machitos, con sus miras telescópicas, disparando contra animales indefensos, en cacerías de puro y negocio, se sienten más hombres. Machitos ibéricos, ojalá sean, ellos sí, una especie en extinción. ¿Eso es ser hombre? Pues vaya un asco.
Totalmente de acuerdo contigo, Marisa.
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